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Dirección del Trabajo confirma que Hugo Morales trabajador de La Moneda falleció tras 18 horas de trabajo seguidas. Trabajadores exigen medidas y renuncia de Administradora del palacio

El pasado 28 de septiembre, Hugo Morales, trabajador gásfiter del Palacio de La Moneda, falleció tras una extensa jornada de 18 horas de trabajo seguidas, según fue señalado entonces y ahora corrobora el Informe de la Dirección del Trabajo. El caso ha develado prácticas abusivas de las jefaturas y extensas jornadas de trabajo para las y los trabajadores en La Moneda, contrariando el relato del Gobierno actual y mostrando los efectos negativos de la «Ley de las 40 horas» que se presentó por el oficialismo como un avance en los derechos laborales. Tras el informe de la Dirección del Trabajo, la Central Unitaria de Trabajadores, CUT, ha exigido la salida de la administradora del palacio, Antonia Rozas.


La familia de Hugo Morales había permanecido en silencio y por semanas había habido un silencio de parte de los grandes medios sobre el caso, pero el informe de la Dirección del Trabajo y una nota en el medio Radio Biobío ha permitido conocer detalles hasta ahora desconocidos.

Tras los hechos, los funcionarios de La Moneda habían denunciado las abusivas prácticas laborales de las jefaturas de las distintas reparticiones centrales del Gobierno, y entre otras medidas, habían planteado la exigencia de salida de la administradora de la Moneda, Antonia Rozas, cercana al Presidente Gabriel Boric desde tiempos en que ambos integraban puestos directivos en la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Fech. Se denunció el hecho de que Hugo Morales, de oficio gásfiter había estado trabajando 18 horas seguidas, y que, al igual que muchos trabajadores del palacio, realizaba excesivas horas extras y era forzado a cumplir tareas excesivas y cumplir con exigentes plazos fijados por las jefaturas.

En sus últimos horas, el trabajador gásfiter Hugo Morales, funcionario bajo el régimen contractual de a contrata desde el mes de agosto y bajo órdenes directas de la administración del palacio, había sido destinado a habilitar una habitación como sala de lactancia. El viernes 27 de septiembre, Hugo Morales tenía turno de 8:30 a 17:30. Sin embargo, los registros biométricos de asistencia señalan que empezó su última jornada a las 8:17 y esta terminó abruptamente la madrugada del sábado, con el ataque cardíaco que le dio muerte. Es decir, en su último día estuvo trabajando por casi 18 horas seguidas. Las jefaturas habían ordenado con urgencia el término de las obras de habilitación de la sala de lactancia. Pero el mismo día de su fallecimiento, habían despedido a dos trabajadores del palacio, a sabiendas de que había labores pendientes que cumplir ese fin de semana. De hecho, quienes trabajaron en esas obras terminaron a las 4:30 de la noche, con Hugo Morales fallecido y dos trabajadores despedidos ese día.

Horas después, el Presidente Boric llega a La Moneda en sus comentadas llegadas en bicicleta para encabezas la reunión de ministros, y no se refirió al tema. Según señala la nota citada, Maritza, viuda de Hugo Morales, se lamenta de la actitud presidencial: «Al Presidente le comunicaron del fallecimiento de un funcionario. Y él no hizo nada. Los trabajadores esperaban que por último hiciera, no sé, un minuto de silencio con ellos. O que se pronunciara brevemente (…) Él no hizo ningún gesto». Señala que tampoco se comunicaron con ella o algún otro integrante de la familia.

Sábado 28 de septiembre, unas horas después del fallecimiento de Hugo Morales, el Presidente Boric se negó a referirse al tema del trabajador funcionario de La Moneda. Foto: Biobío.

Pero esta situación no era puntual en absoluto. Es más, Hugo Morales durante septiembre había realizado 28 horas extras. Además, registraba meses en los que había realizado aún más horas adicionales a su jornada de trabajo. En enero, abril, mayo y agosto, Hugo Morales superó las 50 horas por sobre su jornada regular. Una práctica que, señalan ex trabajadores y agrupaciones de funcionarios, se ha vuelto común entre los trabajadores técnicos de La Moneda desde 2021, cuando Noé Marinao Navarrete quedó a cargo del Subdepartamento de Mantención Técnica, Fernando Tobar, jefe del Departamento de Logística, y con la jefatura de Antonia Rozas como responsable Administradora del palacio.

De hecho, la situación de abusos laborales hacia los funcionarios de varias reparticiones gubernamentales ya había sido denunciada con anterioridad en varias ocasiones, como ocurrió en el mes de abril de este año, en que incluso se realizó una manifestación en el interior del Palacio de La Moneda. Esto ocurrió el 11 de abril del presente año, en que la Asociación Nacional de Funcionarios de la Presidencia de la República (ANFUPRES), la Asociación Nacional de Funcionarios del Ministerio de Secretaría General de Gobierno (ANFUSEGG), Asociación Nacional de Funcionarios SUBDERE, y representantes de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF) y la CUT.

Tras la emisión del informe de la Dirección del Trabajo, la Central Unitaria de Trabajadores, CUT, emitió una declaración pública en la que evige la renuncia de la administradora del Palacio de Gobierno, Antonia Rozas, cercana al Presidente Gabriel Boric.

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